Cada día vemos las noticias y nos damos cuenta que vivir de forma sostenible y ser amigable con el ambiente es más importante que nunca. A través de esta práctica podemos aportar nuestro granito de arena para evitar el deterioro de nuestro planeta.

Crear un estilo de vida sostenible significa aprender a vivir minimizando nuestro impacto en el medio ambiente. Podés lograr esto utilizando menos recursos naturales, reduciendo la cantidad de desechos que producís y reponiendo los recursos que hayan sido usados.

Cortá tus mascarillas antes de botarlas

Debido al COVID-19 la mascarilla se ha vuelto parte de nuestro día a día. Para minimizar su impacto podés cortarles los elásticos antes de desecharlas y así ayudarás a prevenir que los animales, sobre todo las aves, se enreden en ellas. 

Utilizar tazas y pajillas reutilizables

¿Sabías que los vasos para bebidas calientes son más difíciles de reciclar? Quien se encarga de este proceso debe asegurarse de retirar la capa de plástico que está sobre el cartón del vaso para hacerlo impermeable. De otro modo, estos envases no pueden ser reciclados junto al papel.

Asimismo, los vasos plásticos y pajillas son usados en inmensas cantidades. Para reducir la cantidad de plástico que desechás podés llevar tu propio vaso y pedir que te sirvan en él. También podés llevar tu propia pajilla reutilizable del material que más te guste.

NO usés bolsas de plástico

Es muy fácil llenarte de bolsas plásticas después de una ida al supermercado, por eso es mejor llevar con vos un bolso de tela. Te recomendamos utilizar 3 diferentes: uno para artículos de limpieza, otro para carnes y el último para frutas o granos. De este modo podrás tener paz sabiendo que tus compras no se mezclarán ¡Recordá lavarlas cuando las terminés de usar!

Reemplazá las luces de tu hogar

Las luces LED y las lámparas fluorescentes compactas, CFL, son más económicas y duraderas. Este tipo de bujía puede durar hasta 10 veces más que una normal y su luz es muy brillante, ¡no notarás la diferencia!

Reusá los recipientes de alimentos

Productos como el queso o la mantequilla, en ocasiones, vienen en envases plásticos. Para evitar que el recipiente sea de un solo uso, lavalo muy bien con agua y jabón cuando se termine el producto. Podés usarlo para guardar comida o incluso como macetera. 

Separá los desechos

Podés tener tres contenedores, uno para vidrio, otro para papel y el otro para desechos orgánicos. Una vez estén llenos llevalos a un centro de acopio para reciclaje o ponete en contacto con alguien que recolecte estos materiales. 

Aprovechá este momento para enseñarle a tus hijos la importancia del medio ambiente y las diferentes formas de reciclaje.

Llevar un estilo de vida sostenible requiere costumbre, compromiso y conocimiento. Sentite libre de contarle tu iniciativa a tu familia, amigos o vecinos para inspirarlos y animarlos a empezar a reducir la cantidad de desechos que producen.

¡No te frustrés! Al inicio puede ser difícil, pero con el tiempo verás los resultados.